La realidad supera a la ciencia ficción

Moon Park, surge de un hecho real: la compra por parte del artista, de un terreno lunar a la empresa americana “Lunar embassy”, para a partir de él, construir un parque temático  en el que cualquier cosa es posible.

Mi obra trata de como la creatividad y el sistema del arte  pueden hacer realidad sueños imposibles sin necesidad de dinero y grandes medios.

Utilizo el arte como como un juego  de simulación desde el cual poder reflexionar sobre el ser humano, cuestionando la forma en la que la ficción y la realidad se relacionan entre sí.

Para ello empleo una labor didáctica, relacional, empática y respetuosa con el espectador, mediante la creatividad y el humor.

Mis proyectos  suelen ser participativos y juegan a simular aspectos populares y lúdicos con los que todo el mundo puede identificarse, y acaban formando parte de su imaginario colectivo, como Worker Man, el muñeco que me sustituye en el trabajo, la pasta tapa huecos, o la bomba atómica anti discusiones.

Utilizo la pintura, el dibujo, la fotografía, el video  y la instalación, y suelo emplear materiales como madera, cartón, papel, y plástico mediante técnicas artesanales y de bajo presupuesto para simular procesos de representación industriales o estandarizados de alta gama  y presupuestos colosales como son  la industria juguetera, el visual merchandising, el mundo del cine, la industria del libro, la creación de  parques temáticos, etc…

Mis fuentes de inspiración no provienen necesariamente del arte sino también de otras formas de ficción como los cómics, la literatura, el cuento clásico y el cine.